martes, 24 de mayo de 2016

CUANDO TODO VALE EN POLÍTICA: OPOSITORES, REFUGIADOS Y, OBVIAMENTE, VENEZUELA

El gobierno (en funciones) español, empujado por el inicio de la nueva campaña electoral, ha
concedido la nacionalidad española a varios opositores venezolanos, entre los que se encuentran dos familiares de Leopoldo López, encarcelado desde febrero de 2014, y el empresario Luis Carlos Serra Carmona, exdiputado y en la actualidad miembro de la junta directiva del diario opositor al gobierno venezolano El Nacional. [1]

Digo que lo han hecho como parte de la nueva campaña electoral no por maldad ni por falta de
solidaridad hacia las personas beneficiadas de dichas concesiones, sino porque diversas evidencias así me lo muestran.

Existen numerosos perseguidos políticos en distintos rincones del mundo, desde Marruecos a Arabia Saudita, pasando por Israel, Turquía y un largo etcétera, a los que el gobierno español ha hecho caso omiso. A modo de ejemplo, en Marruecos hace apenas un mes moría el activista saharaui Saika Brahim, en huelga de hambre, quien había sido detenido por las autoridades marroquíes mientras participaba en una manifestación pacífica por las mejoras de las condiciones laborales de los trabajadores [2]. El gobierno español no levantó la voz contra Marruecos por esta clara violación de los derechos humanos, como tampoco se ha referido nunca a los activistas saharauis perseguidos por el gobierno marroquí. Así que, ¿por qué existe este “trato de favor” hacia los supuestamente perseguidos opositores venezolanos? Porque desde el PP buscan mandar con este acto un mensaje muy concreto a los españoles.

La nacionalidad entregada a los opositores venezolanos pretenderá utilizarse como arma arrojadiza contra la alianza entre Podemos, Equo, IU y demás organizaciones, aduciendo a la necesidad de concederlas debido a la cruenta deriva totalitaria a la que Maduro y el chavismo en general están llevando a Venezuela y, de paso, tratar de convencernos de que España correría una suerte similar a la del país latinoamericano si Unidos Podemos llegase a gobernar. No lo hacen por bondad o por preservar los derechos humanos. Ahí tenemos, para respaldar mi hipótesis, a miles y miles de refugiados que huyen de la guerra en Siria, pudriéndose en las fronteras europeas, sin que al gobierno español le importe. Y como prueba un dato: La UE ha recibido a 160 refugiados de los 160.000 que se comprometió a acoger; España ha recibido 18 de 16.000 [3] y, además, Rajoy desoyó la oferta de Ada Colau para traer 100 refugiados a Barcelona [4].

Nada, o casi nada, en política sucede por casualidad, sino que obedece a causas concretas. Ejemplos tenemos de sobras: la abdicación del anterior monarca, Juan Carlos, delegando en su hijo Felipe en un momento de total descrédito de la Corona tras varios escándalos como el de Urdangarín o la afición de Juan Carlos por la caza; el caso Puyol copando la totalidad de los medios precisamente cuando CiU empezó a apoyar el derecho a decidir de Catalunya; o el ascenso casi milagroso de Ciudadanos (partido viejoven en Catalunya) para intentar frenar a Podemos (necesitamos un Podemos de derechas, decía aquel banquero). En el juego de la política, insisto, todo sucede en su debido momento. No antes ni después.

Por otro lado, la derecha española aplica el término “preso político” con muy poca o mucha
facilidad dependiendo de donde se halle el sujeto al que poner o no dicha etiqueta. Esto es
obviamente parte del juego. Pero, veamos, ¿es realmente Leopoldo López un preso político? Los medios han repetido hasta el infinito y más allá que esta persona ha sido encarcelada únicamente por sus ideas políticas. Sin embargo, ¿qué ocurriría en España o en EEUU con el promotor de marchas contra el gobierno que dejasen 43 muertos (10 policías entre ellos), más de 800 heridos y 10.000 millones de dólares en daños materiales [5]? ¿Alguien en su sano juicio osaría llamar al organizador de tal evento preso político? Mientras en España, en medio de un montaje policial, se detiene y juzga a dos titiriteros por representar una obra que precisamente contiene un montaje policial (valga la ironía), en Venezuela los opositores se han hartado de insultar al gobierno en televisión o a llamar a la acción violenta y desestabilizadora durante años. ¿Qué ocurriría si Garzón o Iglesias saliesen en los medios diciendo que se deben usar métodos no pacíficos para expresar su frustración con el gobierno de Rajoy? [6]

Si se aplica esta doble vara de medir es porque antes de la llegada de Chávez al gobierno, la
actual oposición (derecha y extrema derecha) se beneficiaba de la extracción del petróleo,
mientras el grueso de la población mendigaba en la miseria [7]. Desde la llegada de Chávez esto cambió, y Venezuela pasó a ser el enemigo de la derecha mundial.

Albert Rivera, por su parte, ha optado por ir directamente a Venezuela para reunirse con la oposición y, de paso, criticar a Podemos [8]. Bonita manera de empezar la campaña electoral, ¿verdad? Por otro lado, ¿qué iba a hacer Rivera sino? ¿Quedarse en España y decir que está deseando pactar con el partido del dinero negro? Eso no da votos, y Ciudadanos, a la vista de las encuestas, los necesita muy mucho. Por otro lado, y retomando el viaje de Rivera al país caribeño, extraña dictadura donde alguien totalmente contrario al supuesto régimen opresor puede ser invitado por la oposición (¿oposición en una dictadura?), la cual ha ganado las últimas elecciones parlamentarias (¿elecciones en una dictadura?) para que hable en contra del gobierno. En otras palabras, ¿alguno de ustedes, estimados lectores, cree que en España se aprobaría invitar a un miembro del Partido Socialista Unificado de Venezuela (partido que preside Maduro) para que hablase en el Congreso de los Diputados?

En definitiva, parece que el inicio de la campaña electoral ha empezado con fuerza y que todo
vale para rascar votos (otro ejemplo lo ilustra el absurdo intento por prohibir la Estelada en el
partido de la copa del Rey). A este ritmo, para el 26J a más de uno se le habrá pegado hasta el
acento venezolano.




Toni Velasco (@avelasgar)





[1] http://www.eldiario.es/politica/Gobierno-Venezuela-nacionalidad-Leopoldo-Lopez_0_517948499.html

[2] http://www.europapress.es/internacional/noticia-muere-activista-saharaui-huelga-hambredetencion-principios-abril-20160416023113.html

[3] http://www.elmundo.es/sociedad/2016/01/13/569536ecca4741600c8b4634.html

[4] http://ccaa.elpais.com/ccaa/2016/03/23/catalunya/1458765680_223101.html

[5] http://www.telesurtv.net/news/Conozca-que-son-las-guarimbas-en-Venezuela-y-quienes-estandetras-20140312-0050.html

[6] https://www.youtube.com/watch?v=kVBZ0Ob9kgw

[7] https://www.youtube.com/watch?v=cSky1utKP80 (minuto 14:40)

[8] http://internacional.elpais.com/internacional/2016/05/24/america/1464059039_030996.html?id_externo_rsoc=FB_CM

lunes, 23 de mayo de 2016

YO A LA CÁRCEL Y TÚ A GRAN HERMANO VIP

Francisco Nicolás Gómez Iglesias, más conocido como “El pequeño Nicolás”, ha entrado en Gran Hermano VIP y se dice que cobrará unos 3.000 euros al día, hecho que parece haber generado las reacciones (de todo tipo) esperadas por los directores del programa para captar audiencia y generar expectación.



Francisco Nicolás es un estudiante de Derecho que en 2014 fue detenido cuando tenía 20 años y acusado de numerosos delitos como estafa, usurpación de funciones públicas y estado civil, malversación de caudales públicos o tráfico de influencia, entre otros. Se descubrió que se había codeado con grandes empresarios españoles, llegando a asistir como invitado a un acto de la Casa Real tras la proclamación de Felipe VI como rey. Su situación actual es de libertad provisional sin fianza. Desde muy joven colaboró con el Partido Popular (siendo fotografiado en numerosas ocasiones junto a Esperanza Aguirre, Aznar y demás) y FAES, y que pidió el voto para Ciudadanos en las elecciones generales de diciembre.

Por otro lado tenemos a Alfonso Fernández Ortega, conocido como Alfon, un joven de izquierdas de Vallecas detenido asimismo cuando contaba 20 años de edad mientras participaba en una huelga. Fue acusado por la Fiscalía de tenencia de explosivos y actualmente cumple condena en prisión. Es importante señalar que dichos explosivos jamás aparecieron y que el estudio holofoscópico de las huellas concluyó que no había ninguna huella del joven en la mochila donde supuestamente portaba dichos artefactos (mochila de la cual Alfon negó ser el dueño en todo momento), además de la denuncia de su abogado con respecto a las numerosas contradicciones presentes en el caso. [1] La única prueba del juicio fue la palabra de la policía.

La distinta suerte de estos dos chicos parece una clara alegoría de lo que es nuestro país, un lugar donde aquellos que provienen de las altas esferas suelen esquivar la justicia con facilidad, cayendo esta sobre el pueblo llano con mucha más contundencia. Resulta casi irónico que Alfon esté cumpliendo condena por defender los derechos laborales de aquellos que indirectamente pagarán el sueldo de Francisco Nicolás viendo el programa en el que participará, ya que si este tipo de programas (calificados como “telebasura”) existen es gracias a las descomunales audiencias que obtienen (España es junto a EEUU el país con más ediciones de Gran Hermano con 16).

El sueldo que recibirá Francisco Nicolás ha sido el objeto de la mayor parte de críticas que ha suscitado la noticia. Sin embargo existen otros sueldos que en comparación dejan el del joven a la altura del betún. Por ejemplo, el presidente de la eléctrica Iberdrola ganó 44.000 euros al día durante el primer semestre de 2015 [2], al tiempo que el precio de la electricidad subía sin parar, mermando los bolsillos de los millones de españoles que todavía no ven la luz al final del túnel que es la crisis. La diferencia entre estos dos personajes es que el segundo se lucra desmedidamente con algo que debería ser un derecho básico y fundamental de los españoles y que a día de hoy, gracias a la inestimable ayuda del gobierno, no lo es. Es contra este tipo de personas contra las que Alfon se manifestaba, contra estas gentes que exprimen al máximo al pueblo español para beneficio de sus intereses monetarios. Por eso Alfon está hoy encerrado, en un acto que busca amedrentar a los trabajadores para que no luchen por lo que es suyo, mientras otros se llenan la boca con España, cotizan en el extranjero y obtienen sus fortunas haciendo negocio con lo que debería ser de todos los españoles.

Las numerosas ediciones de Gran Hermano y todo lo que deriva de ellas son el triunfo de la mediocridad, de unos valores que deberían avergonzarnos como sociedad, son el señuelo resplandeciente que nos aleja de los problemas reales que empantanan el país. Es, como diría Morfeo en Matrix, el mundo que ha sido puesto ante nuestros ojos para ocultarnos la verdad. Todavía recuerdo el trato de los medios a Alfon (tachado de radical, extremista o terrorista) y Francisco Nicolás (definido más como pícaro, joven, travieso, etc.), buscando que la gente se haga una imagen de uno y de otro totalmente distintas.

Es tarea de los trabajadores, de la gente de abajo, el tomar conciencia de todo esto y salir a la calle a luchar por nuestros derechos y acabar con las bochornosas desigualdades que hoy existen en nuestro país, al igual que hizo Alfon. De paso, apagando la tele, quizás logremos que Gran Hermano no cumpla una nueva edición.




[1] https://www.youtube.com/watch?v=P0KRWUiuGAA

[2]http://www.infolibre.es/noticias/economia/2015/07/27/el_presidente_iberdrola_gano_000_euros_dia_primer_semestre_2015_35956_1011.html